La concentración de personas en las ciudades genera grandes retos sociales, económicos y medioambientales. Una gestión atenta de la movilidad eléctrica es clave para un desarrollo moderno y equilibrado. Para conseguir un cambio general hacia la movilidad eléctrica, primero hay que implementar medidas que lo propicien, como facilitar el aparcamiento y desarrollar la red de puntos de recarga.
En el ámbito del vehículo eléctrico, la ciudad ya dispone de una red de más de quinientos puntos de recarga. Esta red se ampliará próximamente de la siguiente forma: once puntos de recarga rápida para coches, que ayudarán a reforzar el servicio y a mejorar la cobertura en la ciudad, y dos puntos de carga nuevos para motos. También se renovarán treinta cargadores para motos.
El objetivo es que la red de puntos de recarga esté distribuida por toda la ciudad, y reforzar aquellos puntos de más demanda de modo que los usuarios de vehículos eléctricos puedan recargar los vehículos con facilidad.